“Ningún hombre es una isla, algo completo en sí mismo; todo hombre es un fragmento del continente, una parte de un conjunto”
Por: David A. Gómez Ferreira
Comprender el concepto de desarrollo humano en la actualidad es bastante complejo, las carencias y los sucesos a través de la historia han generado diversas perspectivas; las cuales, sin embargo, se han centrado en el proceso sociocultural de los individuos y en la preservación del respeto de los derechos humanos.
Es importante resaltar del texto, las diferentes miradas de los autores citados, cada uno agrega una concepción reflexiva sobre las condiciones y contextualizaciones de los niveles de desarrollo del ser humano. Vale la pena manifestar que de todas las nociones citadas, se hace referencia al enfoque holístico del desarrollo humano, el cual, se destaca por hacer alusión a la transcendencia del proceso biológico al ser social y cultural. En ese sentido, se concibe al ser humano como el principal actor de su desarrollo, las experiencias desde muy temprana edad generan cambios y aprendizajes, los cuales se producen, mediante una interacción con su medio y con los demás. Es decir, que es el mismo individuo, el encargado de su propio desarrollo pero sin excluir la convivencia e interacción con las demás personas. La relación del ser humano desde sí mismo, con los demás y con su entorno, es de gran importancia para este enfoque, ya que esta relación conlleva a potencializar según Henri Wallon el desarrollo integral desde el área emocional, corporal, cognitivo hasta comunicacional.
Finalmente, podemos concluir que el texto aporta un gran análisis retrospectivo del desarrollo humano y de las concepciones que tiene la sociedad; por consiguiente una persona no puede tener un nivel de desarrollo adecuado si no hay un convencimiento interno y la posibilidad de crecer colectivamente, o sea, debe existir la interacción constante con el entorno social y con el medio ambiente.
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